miércoles, 15 de julio de 2020

Corro hacia la tormenta

Corro hacia la tormenta sin nada más que decir.  Grotesco aroma a desastre que nunca es bien recibido. Alargo la zancada y nada tiene mucho sentido, pero no tengo miedo y continúo sin levantar la mirada.

Rayos que iluminan la antesala del estruendo. Nunca supe cómo actuar cuando me persigue el desierto. Pero metro a metro mi camino se va acortando y aquellas nubes negras no preguntan hasta cuándo. 

Sufrimiento angosto por el que tengo que pasar. Camino solo hay uno y hace tiempo que dejé de elegir la novela sobre mi vida que algún día volveré a escribir. Caricias húmedas que limpian mi piel. Comienza con alivio pero pronto todo tendrá un poso cruel. 

Pensamientos vacíos, música sorda. Mi mente agota las gamas de colores y mi cuerpo es el que toma las decisiones. Al otro lado de la tormenta, una sonrisa perfecta me espera. Ahora escucho al sufrimiento y no concibo todo lo aguantado. 

Por fin el sol se cuela entre tanto paisaje negro. Seco mis sentidos y vuelvo a encontrarme satisfecho. Prosigo mi camino con un abrazo imaginado, no vuelvo por lo andado aunque por aquí antes he pasado. Todo es nuevo, nada se ha perdido, solo es el tiempo que me hizo hacer un largo recorrido.

Y ahora solo necesito descansar ...

No hay comentarios:

Publicar un comentario